1440 Minutos de regalo.

Por Carlos Di Nizo

Esta es la cantidad de minutos que tenemos en cada día de 24 horas.

Los vivimos de una manera muy veloz, rutinaria, con altibajos en todos los sentidos, emociones encontradas, sentimientos que van de un lugar a otro, en fin los vivimos según nuestras costumbres, ideas, ocupaciones, miedos, alegrías, etc. Pero seguro que no hacemos este cálculo de cuántos minutos tenemos por delante cada día.

Le invito a pensar un poco, imaginemos que son un regalo, para vivir los 1440 minutos de cada día deberíamos esperar que «alguien» nos traiga ese regalo, cada noche al acercarse la hora 24 y poder pasar a las 0 horas del siguiente día, debería venir ese «alguien», el que nos regala el tiempo y dejarnos el paquete y poder pasar a los 1440 minutos siguientes.¿lo está imaginando?.

Es obvio que esto se repite pero hagamos una reflexión más, supongamos que una noche no viene como acostumbra, no llega, miramos las agujas del reloj acercándose a las 24 hs y no nos han traído el nuevo paquete, nos damos cuenta que no tenemos a los 1440 minutos próximos a vivir.

Comenzamos a sufrir, pensamos que ya no tendremos más regalos, que éstos son los últimos minutos que nos quedan de vida, diríamos que ya se termino todo.

Seguramente una mezcla de miedo, tristeza, dolor, angustia, etc., llenaría nuestra vida, simplemente pensaríamos que es el fin.

Volviendo a la realidad, debemos recordar que efectivamente es así, tener los 1440 minutos de cada día es un regalo, es un muy valioso regalo de Dios, quizás no nos acordamos seguido de esto, o quizas lo pensamos en algunos momentos, pero los vivimos sin considerarlo de esa forma, puede ser que la rutina, la costumbre, la falta de humildad, la soberbia, nos hagan olvidar que no somos los dueños de los 1440 minutos, que los recibimos y vivimos por un regalo de Dios y por lógica merecen un agradecimiento continuo, merecen una reflexión constante, merecen recordar que Dios nos hace el regalo sólo porque Él quiere, nada podemos hacer para merecerlo, es sólo por su inmenso amor, por las promesas que nos dejó, por el propósito que tiene con cada uno de nosotros.

1440 minutos parecen un tiempo relativamente grande para hacer muchas cosas, pero ¿cuántos de esos minutos dedicamos a decir GRACIAS DIOS?, ¿cuántos para conversar con Él, para aprender lo que nos quiere enseñar, para leer su Palabra y estar cerca suyo como siempre nos pidió?.

Todos sabemos el uso de que le damos a los 1440 minutos de cada día, pero tengamos presente que agradecer a Dios por sus regalos también nos llena de confianza, amor y esperanza.
Separemos unos minutos todos los días y digamos con fuerza en nuestro corazón: GRACIAS DIOS.

Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él. (Colosenses 3:17 RVR1960)

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